lunes, 1 de febrero de 2010

Volvió

Volvió: "

 VOLVIÓ

Volvió. Y mi vida entró en silencio. En el que apenas se logra escuchar el eco del agua. En el que el movimiento de las nubes se siente impresindible. Ni mis gafas de sol oscurecen lo que no quiero ver.  Los niños en la plaza no logran opacar el sonido de mis pensamientos. Y tirito. Estoy tiritando, porque no se suponía que esto pasara. Pero todo lo supuesto es mentira. Mis ojos petrificados no son capaces de parpadearte, no puedo ignorarte, porque estás acá. Donde nunca te quise apresiar. Y me derrumbaste. Como el palitroque, o un boliche. Me derribaste tal cual lo haces siempre. Con todo el odio que debería tenerte, y darte, lo único que escribo son cartas de amor y decepción. Mi voluntad no ejerce palabra. Siento como si estuviera debajo del agua, burbujeando sentimientos. Sin eco sin absorción. Flotando en el viento inexistente. Te metiste donde nunca debí haberte dejado. En mi punto débil, y mi arma letal al mismo tiempo. Te metiste donde no debiste, en mi corazón. Lo más lejos de mi inteligencia y de mi cordura.

Me baleaste, como en la caza, un rico cordero, o un ave de juego. Todavía tengo los pedazos de plomo esparcidos en mi pecho. Todavía tengo la herida abierta, la de la vez pasada, las veces pasadas. Y no tienes piedad, no tienes compasión. Agarraste tu arma y me disparaste, como si nada te importara, y nada te importó. Y ahora me tienes recostada en tu cama, en tu vida. Con los ojos desorbitados y la mirada perpleja. Sin nada que decir ó hacer. No soy yo la de tus sueños, ni la de tu pensamiento diario, pero sin embargo me tienes acá escuchándote. Claramente no te odio. Pero no se lo que siento. No lo sé.

Mezclo amor, mucho amor, con decepción. Un poco de amargo y dolor. Dolor como nunca. Casi parecido al de un guerrero, en guerra. Pero quién soy yo para hablar del dolor por el que ellos pasan. También esperanza, es verdad, tengo esperanza de un futuro contigo, esperanza que va descendiendo desde que te conocí. Y también tengo pasión, pasión de todo lo que vivimos, de todo lo que sufrimos juntos. Pasión de los besos escondidos, de las escapadas nocturnas, de el secreto de lo nuestro.Pasión por tí, por tu sonrisa chueca y tu olor, por tus ojos y tu barba deshecha.

Creo que dije que jamás te volvería a escribir. Me equivoqué. Y volviste.
" Lola.

No hay comentarios:

Publicar un comentario